Saber qué desencadena una reacción alérgica puede cambiar por completo la vida diaria de una persona. En este artículo repasamos cómo se diagnostican las alergias, centrándonos en las dos herramientas más utilizadas: las pruebas en la piel y los análisis de sangre. También explicamos cómo el Servicio de Urgencias de Helicópteros Sanitarios para Reacciones Alérgicas en la Costa del Sol está disponible para actuar cuando una reacción inesperada se vuelve grave.
Por qué es importante diagnosticar bien una alergia
Las alergias no siempre se presentan de forma evidente. A veces son pequeños detalles: un picor tras comer un alimento nuevo, una congestión nasal persistente o un sarpullido que aparece y desaparece. En otras ocasiones, los síntomas irrumpen con fuerza. Identificar con precisión qué está provocando esa respuesta del organismo es esencial para controlar los síntomas y evitar exposiciones peligrosas.
Un diagnóstico certero permite:
• Comprender qué desencadena la reacción.
• Recibir tratamientos ajustados a cada caso.
• Reducir el riesgo de sufrir episodios graves en el futuro.
Las pruebas de alergia suelen ser sencillas, rápidas y con resultados bastante inmediatos.
Pruebas cutáneas: rápidas y muy reveladoras
Las pruebas en la piel siguen siendo la herramienta diagnóstica más utilizada. Son simples, poco invasivas y ofrecen resultados durante la propia consulta. Consisten en aplicar una pequeña cantidad del alérgeno sospechoso —polen, ácaros, caspa de animales, determinados alimentos…— sobre la piel del antebrazo o la parte alta de la espalda. Después se realiza un pequeño rasguño o pinchazo superficial para que la sustancia contacte con el sistema inmunitario.
Si en unos 15 minutos la zona se enrojece, pica o se inflama, significa que el organismo está reaccionando a ese alérgeno.
Se recomiendan con frecuencia porque:
• Permiten obtener resultados inmediatos.
• Posibilitan analizar varios alérgenos en la misma sesión.
• Son seguras tanto para adultos como para niños.
No obstante, no siempre son la mejor opción. En personas que toman antihistamínicos o que padecen ciertos problemas dermatológicos, puede ser necesario recurrir a otra alternativa.
Análisis de sangre: la opción cuando la piel no puede utilizarse
Los análisis de sangre miden la cantidad de anticuerpos IgE específicos frente a distintos alérgenos. Estos anticuerpos aumentan cuando el sistema inmunitario detecta una sustancia como una amenaza.
Tras extraer una muestra de sangre, el laboratorio determina qué alérgenos están provocando esa respuesta.
Los análisis de sangre resultan especialmente útiles en casos como:
• Pacientes con eccema severo o dermografismo, que dificultan las pruebas cutáneas.
• Situaciones en las que no es posible suspender antihistamínicos.
• Riesgo elevado de reacción fuerte durante una prueba en la piel.
• Necesidad de estudiar alérgenos poco habituales.
Los resultados tardan algo más que en las pruebas cutáneas, pero ofrecen una visión completa y detallada del comportamiento inmunitario.
Después del diagnóstico: qué ocurre
Tanto los resultados de las pruebas cutáneas como los de los análisis de sangre sirven para diseñar un plan de tratamiento. Este puede incluir evitar ciertos desencadenantes, tomar antihistamínicos de forma regular o iniciar inmunoterapia (vacunas o gotas sublinguales). En casos de riesgo, se recomienda llevar siempre un autoinyector de adrenalina.
Servicio de Urgencias para Reacciones Alérgicas en la Costa del Sol
Incluso con un buen control, las alergias pueden sorprender. Cuando los síntomas se intensifican, como dificultad para respirar, hinchazón o mareo, la atención inmediata resulta vital. El Servicio de Urgencias de Helicópteros Sanitarios para Reacciones Alérgicas en la Costa del Sol responde con rapidez y proporciona asistencia médica experta justo cuando más se necesita.
Para quienes conviven con alergias, disponer de acceso rápido a ayuda de urgencia puede marcar la diferencia. Nuestro equipo de emergencias está preparado para atenderte en cualquier momento en el que una reacción alérgica se vuelva urgente.